Por el Predicador Catolico Salvador Gomez
Y sucedio que, estando el orando en cierto lugar, cuando termino le dijo uno de sus discipulos: "Señor, enseñanos a orar.."
Jesus oraba, sin duda alguna de una manera nueva y diferente, tanto que sus discípulos, muchos de ellos con una gran trayectoria de oracion propia de la religion judia y ademas graduados en la escuela de Juan Bautista, sintieron la necesidad de pedir al Maestro ser instruidos en el arte de saber orar.
Esta actitud debe desafiarnos a nosotros, los modernos discípulos de Jesus, que contando con menos conocimiento y experiencia que los primeros, mostramos al mismo tiempo menos interes para aprender a orar.
Afortunadamente y como un verdadero signo de los tiempos, el Espiritu Santo va suscitando en personas y comunidades un deseo profundo de orar, que día con día va creciendo.