Monday, January 27, 2014

PERDONAR ES SANAR: Una experiencia liberadora



Autor Marcelo Martin.

Hoy quiero hablarles del perdón. Lo que aquí les comparto lo aprendí, y experimenté, siendo un jovencito de 17 años en un retiro que hice con el P. Robert de Grandis, allá en Caracas a principios de los ochenta. La experiencia sanadora del perdón, a pesar de los altibajos de mi historia, creo que ha marcado mi vida. Hoy en la tarde, después de venir de La Laguna, me acordé de un pequeño artículo que escribí hace unos años para la web guanchejoven y sentado frente al ordenador he "tuneado" mis propias líneas. Esto es lo que me ha salido.
 

Perdonar, una exigencia del Evangelio

Jesús en este punto es, sencillamente, contundente. Frente a las ofensas que recibo de los demás, el Señor me invita a dar una respuesta que, lo confieso, me sacude por dentro: ¡perdona a tu hermano! No se trata de un consejito moral, que puedo seguir para andar por esta vida de buen rollito. No, la verdad, no siempre puedo estar haciendo el papel del tío “guay” de la partida. Frente a los problemas en mis relaciones con los “otros”, el Señor no me dice que “pase” sin más, como si nada hubiera ocurrido. Más bien se me pide que reconozca la ofensa recibida, en toda su dolorosa verdad, y que la perdone, imitando así a Jesús que continuamente me perdona y recibe.

Thursday, January 23, 2014

ORACION DE UN ENFERMO, JUAN PABLO II



Señor, Tú conoces mi vida y sabes mi dolor. Has visto mis ojos llorar, mi rostro entristecerse.
Mi cuerpo lleno de dolencias y mi alma traspasada por la angustia.
Lo mismo que te pasó a ti cuando, camino de la cruz, todos te abandonaron.


Hazme comprender tus sufrimientos y, con ellos, el amor que Tú nos tienes.
Y que yo también aprenda que uniendo mis dolores a los tuyos, tienen un valor redentor por mis hermanos.
Ayúdame a sufrir con amor, hasta con alegría.


Si no es posible que “pase de mí este cáliz” te pido por todos los que sufren:
Por los enfermos como yo, por los pobres, los abandonados,
los desvalidos, los que no tienen cariño ni comprensión y se sienten solos.


Señor, has que estas dolencias que me aquejan me purifiquen, me hagan más humano,
Me transformen y me acerque más a Ti.
Amén.

Juan Pablo II

Monday, January 13, 2014

Pregunta al Padre Joseph Burtka, L.C.

¿Y si no me gusta rezar?
 
Pregunta: Estimado Padre Joseph, quizá éste no sea el lugar (o el blog) para plantear esta pregunta, pero ¿qué le diría usted a alguien que "no le gusta rezar"? No estoy diciendo que debe ser algo placentero, entretenido, etc., pero yo jamás siento ningún deseo de rezar y cuando lo hago es algo incómodo, insípido y motivado sólo por algún sentido de obligación. Supongo que será una obligación legítima... pero sólo siento que estoy hablando conmigo mismo. Nunca he tenido ninguna clase de experiencia espiritual ni al orar ni en ningún otro momento. Además, todo lo que he leído parece decir que las formas de oración de petición son más bien indebidas, que no debe pedirse nada. Entonces, me siento confundido...

...Estoy intrigado (y la verdad gratamente sorprendido) por la sugerencia de rezar al menos 5 minutos diariamente que hace en un artículo anterior, porque yo hubiera pensado que cualquier persona que lee este blog ya estaría rezando diariamente y probablemente mucho más de 5 minutos. Creo que sobrestimé.

De cualquier forma, disfruto los interesantes correos en este blog. Disculpe si mi(s) pregunta(s) son ofensivas de algún modo... No soy católico, sólo soy un pagano que está considerando la idea de convertirse... de ahí que lea blogs católicos como éste.

Responde el Padre Joseph Burtka, L.C

Respuesta: Cuando leí tu pregunta por primera vez, pensé en las muchas personas que conozco y que de manera particular no les «gusta» rezar durante varias veces al día o durante algunos períodos de su vida, porque sus mentes están ocupadas en otros asuntos o porque tienen preocupaciones y dificultades prácticas o simplemente porque están cansados y no se sienten con ganas de rezar.

Sin embargo, tu pregunta es más profunda porque habla sobre no tener el gusto de rezar «en lo más mínimo».

Por las limitaciones de la correspondencia electrónica y al no tener la posibilidad de una reunión en persona para preguntas posteriores, mi mejor intento de una respuesta para tu dilema (el cual por cierto no es raro) sería la necesidad de ahondar en un conocimiento más profundo de Dios.

El antiguo adagio «No se puede amar lo que no se conoce» está en el centro del problema. Si Dios es alguien muy extraño para mí o si yo sé muy poco de Él, o si - hablando hipotéticamente - Dios simplemente no tiene influencia en mi vida, entonces la oración se va a dificultar y va a parecer como que «estoy hablando conmigo mismo».

Yo recomiendo llegar a conocer más a Dios, y especialmente la persona de Jesucristo. Sólo el llegar a conocerlo –la revelación del Padre- llevará, con toda seguridad, tu corazón a amarlo. No creo que sea necesario comenzar con teología profunda –sólo tienes que tomar un libro sobre la vida de Cristo y ver quién es Él, cómo trató a las personas, el amor que tuvo para todos, hombres y mujeres.

El Evangelio es impresionante. Es el libro ideal con el que se inicia, pero también hay otros que narran la vida de Cristo de una manera sencilla y completa y sirven para enriquecer nuestra comprensión. Yo recomiendo Conocer a Jesucristo de Frank Sheed, pero hay muchos, muchos más.

Por la manera como planteas tu pregunta, me parece que nuestro Señor está buscándote. Tú no eres católico, estás pensando sobre cosas espirituales, estás deseando saber más sobre la oración. Estas cosas no suceden de la nada, así que pienso que te encuentras en una situación muy favorable y que definitivamente Dios bendecirá todos tus buenos deseos.

Sólo una palabra más sobre la oración de petición. Ésta no sólo es una forma muy válida de oración, sino que en muchos pasajes del Evangelio, el Señor mismo nos exhorta a pedir... y pedir muchas veces, sin darnos por vencidos. «Pide y recibirás» es sólo un ejemplo. Mi favorito es la oración del Señor, el padrenuestro, que está llena de peticiones –algunas para Dios mismo (santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad) y algunas para nosotros (danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal). Dios es el Padre bueno por excelencia y le gusta escuchar que sus hijos le pidan. Sólo experimentarás su gozo si le pides por tus necesidades.

Tomado de  http://www.la-oracion.com.

Sunday, January 12, 2014

ORACIÓN PARA LA SALUD DE UN HIJO ENFERMO



Amado Señor, tú conoces el corazón de tus hijos, y no te quedas indiferente ante el pobre que te suplica. Tú sabes lo que nos aflige el bienestar de nuestros niños, tu comprender la preocupación de los papás ante la enfermedad de alguno de sus hijos. Vengo hoy, como el funcionario real del Evangelio, a pedirte que desciendas y sanes a nuestro niño/a (nombre con fe al niño/a enfermo por quien se está orando de manera especial y el mal que lo aqueja).

Aún desde la preocupación que nos causa su enfermedad, desde el dolor y el desconcierto, si esta enfermedad está dentro de lo que tu permites, aceptamos este momento como ocasión de purificación, de abandono en tus manos, de ofrecimiento generoso de nuestras vidas. Aceptamos este momento como una ocasión para unirnos desde el sufrimiento a los dolores de Cristo por la salvación del mundo (Colosenses 1, 24) (Tómese unos minutos y, en calma, que su corazón se una a lo que acaba de decir con sus labios: “con este sufrimiento, me uno, Señor, a tu pasión…”)

Ahora, Señor, a ti que quieres que tengamos vida en abundancia, te pido que por el poder del misterio de tu infancia y tu vida oculta en el hogar de Nazaret, sanes al niño/a a quien tú conoces y amas. Cuida de su cuerpito y de su alma. Pasa tu mano sanadora sobre él para que sienta tu alivio, tus cuidados y se restablezca prontamente, según tu voluntad.

Tú, que recibiste los amorosos cuidados de María y José, consuela y reanima a su papá y a su mamá, no dejes que caigan en la desesperación, en la duda, en la depresión, sino que desde su dolor y preocupación recurran a ti como fuente de verdadera, plena, y duradera sanación del cuerpo y del alma.
Te presentamos el lugar donde se encuentra el niño, reviste ese sitio con tu fuerza y gracia. Aleja de allí todo lo que, material o espiritualmente, puedan ser un obstáculo para la pronta recuperación.
Te presentamos los profesionales médicos que atienden al niño, revístelos con tu sabiduría, ilumínalos para que logren dar con acierto en el diagnóstico y encuentren la medicación y tratamiento indicado. Tómalos como instrumentos de tu sanación.

María, madre de Jesús y madre nuestra, que con esmero y constancia, cuidabas de tu niño, mira el corazón de la madre e infúndele confianza, para que también ella, como tu, pueda ver crecer a su hijo en estatura, sabiduría y gracia, delante de Dios y de los hombres.

Querido San José, tú que fuiste el protector de la Sagrada Familia, y la defendiste de todos los peligros y hasta de la muerte segura en la persecución de Herodes, te presento al papá de esta criatura, intercede ante tu amado Hijo Jesús, para que logre mantenerse fuerte aún en el dolor y la preocupación. Que logre conseguir los medios necesarios para la buena atención de su hijo/a. ayúdalo a no decaer y a mantenerse lúcido a la voluntad de Dios.

Señor, tu dijiste que creyéramos que ya hemos obtenido lo que te pedimos con fe en oración, ahora levanto mi voz y mis brazos para darte gracias por la salud que recibirá este niño por el poder de tu amor que escucha esta oración confiada. Reconocemos que ya estás actuando y sanando. Como el funcionario del Evangelio, nosotros también reconoceremos que es en este mismo momento que estas restableciendo salud y bienestar. Te alabo en fe. Te reconozco Señor y Salvador de nuestras vidas, sin ti estamos perdidos. Te amamos Señor y reconocemos tu grandeza. A ti la gloria por los siglos sin fin. Amén.

(Padrenuestro, Ave María, Gloria)

Cristologia: Jesucristo Verdadero Dios y Verdadero Hombre



1. 'Creo... en Jesucristo, su único Hijo (= de Dios Padre), nuestro Señor; que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, y nació de Santa María Virgen'. El ciclo de catequesis sobre Jesucristo, que desarrollamos aquí, hace referencia constante a la verdad expresada en las palabras del Símbolo Apostólico que acabamos de citar. Nos presentan a Cristo como verdadero Dios (Hijo del Padre) y, al mismo tiempo, como verdadero Hombre, Hijo de María Virgen. Las catequesis anteriores nos han permitido y cercarnos a esta verdad fundamental de la fe. Ahora, sin embargo, debemos tratar de profundizar su contenido esencial: debemos preguntarnos qué significa 'verdadero Dios y verdadero Hombre'. Es esta una realidad que se desvela ante los ojos de nuestra fe mediante a autorrevelación de Dios en Jesucristo. Y dado que ésta (como cualquier otra verdad revelada) sólo se puede acoger rectamente mediante la fe, entra aquí en juego el 'rationabile obsequium fidei' el obsequio razonable de la fe. Las próximas catequesis, centradas en el misterio del Dios) Hombre, quieren favorecer una fe así.

Consejos Saludables: Los beneficiones de las Almendras




¿Desea prevenir un infarto, reducir sus niveles de  colesterol, controlar el apetito? La buena noticia es que la respuesta no es  una nueva píldora. Todos estos beneficios los puede obtener con las almendras.

   
Si bien son altas en calorías, por lo que en las dietas  muchos les consideran prohibitivas, en los últimos 5 años estudio tras estudio  ha demostrado que un poco de almendras al día puede ser de las mejores  medicinas.

   
Un  estudio publicado en la Revista Americana de Nutrición Clínica en el año 2005,  vino a comprobar esto. Se compararon varios alimentos (incluyendo las  almendras) que individualmente han demostrado capacidad de reducir lo niveles  de colesterol, vs los medicamentos tradicionales (estatinas). El combo de  alimentos demostró ser igual de efectivo en reducir el colesterol total y el  LDL (“colesterol malo”) en relación a las estatinas. Los científicos se  refirieron a las almendras como las “estrellas” del combo, ya que por sí solas  contienen todos los nutrientes que se consideraron esenciales para el control  del colesterol: fitoesteroles, fibra, flavonoides y proteína vegetal, además de  ácidos grasos esenciales.

Monday, January 6, 2014

¿ORO, INCIENSO Y MIRRA?




LOS SANTOS REYES MAGOS AMABLES TE LLEVARON SUS DONES AL PESEBRE DIVINO MENSAJERO.
AL DUEÑO DEL ETERNO UN POCO DE ORO FINO, AL DIOS DEL UNIVERSO INCIENSO PERFUMADO, AL HOMBRE DE DOLORES LA MIRRA DEL CONSUELO.
SEÑOR, ¿YO QUE TE OFREZCO?
MIS TRABAJOS Y ESFUERZOS QUE NO LLEGAN A SER ORO,
MIS POBRES ORACIONES QUE INCIENSO NO ASEMEJAN,
MI DOLOR Y GEMIDOS QUE TU CONSUELO ANHELAN.
NO TENGO PARA DARTE TAN SOLO MIS ANHELOS,
SUEÑOS DE LIBERTAD Y ENTREGA GENEROSA.
TAN SOLO ANHELOS ROTOS Y SUEÑOS QUE AÚN NO ALCANZO,
HOY PONGO ANTE EL PESEBRE, ¡OH REY DE LOS HUMILDES!
SI ME MIRAS SOY CIERTO DE QUE CONTIGO ALCANZO
ANHELOS DE INFINITO Y SUEÑOS BIEN LOGRADOS.
¡OH PARVULO INOCENTES INCLINA A MI TUS OJOS!
TU DULCE MIRAR BUENO SERÁ MI FORTALEZA,
SERÁ LUZ SUFICIENTE TU MIRAR AMOROSO,
SERA MI ORO Y MI MIRRA TU CONSUELO PIADOSO. AMÉN.

FELIZ AÑO A TODOS QUERIDOS HERMANOS, ESPERAMOS SUS PETICIONES PARA LA PRIMERA NOVENA DE ORACION POR SUS NECESIDADES.

P. Guadalupe Santos y Heraldos de la paz.

Sunday, January 5, 2014

Fiesta de la Epifanía o Día de Reyes




Autor: Tere Fernández | Fuente: Catholic.net

Los pastores y reyes del Oriente visitan a Jesús el Mesias, le llevan regalos y lo adoran con oro, incienso y mirra.

Origen de la fiesta:

El 6 de enero se celebraba desde tiempos inmemoriales en Oriente, pero con un sentido pagano: En Egipto y Arabia, durante la noche del 5 al 6 de enero se recordaba el nacimiento del dios Aion. Creían que él se manifestaba especialmente al renacer el sol, en el solsticio de invierno que coincidía hacia el 6 de Enero. En esta misma fecha, se celebraban los prodigios del dios Dionisio en favor de sus devotos. 
La fiesta de la Epifanía sustituyó a los cultos paganos de Oriente relacionados con el solsticio de invierno, celebrando ese día la manifestación de Jesús como Hijo de Dios a los sabios que vinieron de Oriente a adorarlo. La tradición pasó a Occidente a mediados del siglo IV, a través de lo que hoy es Francia.

Origen de la Rosca de Reyes



Después de que los Reyes adoraron a Jesús, un ángel les avisó que no regresaran donde Herodes y ellos regresaron por otro camino. Herodes al enterarse que había nacido el Rey que todos esperaban, tuvo miedo de perder su puesto y ordenó matar a todos los niños menores de dos años entre los cuales se encontraría dicho Rey.

La Sagrada Familia huyó a Egipto y el niño Dios se salvó, otras familias escondieron a los bebés en tinajas de harina y así no fueron vistos y salvaron sus vidas. Desde entonces, los judíos comían pan ázimo el 6 de enero en el que escondían un muñeco de barro recordando este acontecimiento.