Sunday, September 8, 2013

Sexualidad Cristiana:

Pregunta:
Por favor, Padre, quisiera saber si es pecado la masturbación y qué dice la Iglesia al respecto. 



Responde el P. Miguel Ángel Fuentes, I.V.E.
Respuesta:

Estimado:

La masturbación es pecado cuando es un acto libre y premeditado (o sea, cuando reúne las condiciones que exige todo pecado mortal: material grave, conocimiento y consentimiento perfectos); distinto es el caso de aquellas personas que realizan estos actos de modo enfermizo y compulsivo (razón por la cual el Catecismo en el número 2352 aclara: 'para emitir un juicio justo acerca de la responsabilidad moral de los sujetos y para orientar la acción pastoral, ha de tenerse en cuenta la inmadurez afectiva, la fuerza de los hábitos contraídos, el estado de angustia u otros factores psíquicos o sociales que pueden atenuar o tal vez reducir al mínimo la culpabilidad moral').


Ha tocado largamente el tema la Declaración 'Persona humana', de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Le transcribo el texto:

'Con frecuencia se pone hoy en duda, o se niega expresamente, la doctrina tradicional según la cual la masturbación constituye un grave desorden moral. Se dice que la sicología y la sociología demuestran que se trata de un fenómeno normal de la evolución de la sexualidad, sobre todo en los jóvenes, y que no se da falta real y grave sino en la medida en que el sujeto ceda deliberadamente a una autosatisfacción cerrada en sí misma (ipsación); entonces sí que el acto es radicalmente contrario a la unión amorosa entre personas de sexo diferente, siendo tal unión, a juicio de algunos, el objetivo principal del uso de la facultad sexual.

Tal opinión contradice la doctrina y la práctica pastoral de la Iglesia católica. Sea lo que fuere de ciertos argumentos de orden biológico o filosófico de que se sirvieron a veces los teólogos, tanto el Magisterio de la Iglesia, de acuerdo con una tradición constante, como el sentido moral de los fieles, han afirmado sin ninguna duda que la masturbación es un acto intrínseca y gravemente desordenado. La razón principal es que el uso deliberado de la facultad sexual fuera de las relaciones conyugales normales contradice esencialmente a su finalidad, sea cual fuere el motivo que lo determine. Le falta, en efecto, la relación sexual requerida por el orden moral; aquella relación que realiza el sentido íntegro de la mutua entrega y de la procreación humana en el contexto de un amor verdadero. A esta relación regular se le debe reservar toda actuación deliberada de la sexualidad. Aunque no se puede asegurar que la Sagrada Escritura reprueba este pecado bajo una denominación particular del mismo, la tradición de la Iglesia ha entendido, con justo motivo, que está condenado en el Nuevo Testamento cuando en él se habla de 'impureza', de 'lascivia' o de otros vicios contrarios a la castidad y a la continencia.

Las encuestas sociológicas pueden indicar la frecuencia de este desorden según los lugares, la población o las circunstancias que tomen en consideración. Pero entonces se constatan hechos. Y los hechos no constituyen un criterio que permita juzgar del valor moral de los actos humanos. La frecuencia del fenómeno en cuestión ha de ponerse indudablemente en relación con la debilidad innata del hombre a consecuencia del pecado original; pero también con la pérdida del sentido de Dios, con la depravación de las costumbres engendrada por la comercialización del vicio, con la licencia desenfrenada de tantos espectáculos y publicaciones; así como también con el olvido del pudor, custodio de la castidad.

La sicología moderna ofrece diversos datos válidos y útiles en tema de masturbación para formular un juicio equitativo sobre la responsabilidad moral y para orientar la acción pastoral. Ayuda a ver cómo la inmadurez de la adolescencia, que a veces puede prolongarse más allá de esa edad, el desequilibrio síquico o el hábito contraído pueden influir sobre la conducta, atenuando el carácter deliberado del acto, y hacer que no haya siempre falta subjetivamente grave. Sin embargo, no se puede presumir como regla general la ausencia de responsabilidad grave. Eso sería desconocer la capacidad moral de las personas.

En el ministerio pastoral deberá tomarse en cuenta, en orden a formar un juicio adecuado en los casos concretos, el comportamiento de las personas en su totalidad; no sólo en cuanto a la práctica de la caridad y de la justicia, sino también en cuanto al cuidado en observar el precepto particular de la castidad. Se deberá considerar en concreto si se emplean los medios necesarios, naturales y sobrenaturales, que la ascética cristiana recomienda en su experiencia constante para dominar las pasiones y para hacer progresar la virtud' (Congregación para la Doctrina de la Fe, Declaración 'Persona humana', n. 9).

2 comments:

  1. Hola, soy cristiano y necesito que me aconsejes.
    Durante un tiempo en mi adolescencia he estado teniendo fantasías sexuales que incluían diversas formas de dominación sobre la mujer, acompañadas en alguna ocasión por vídeos que recreaban situaciones de esa temática. Yo jamás desee hacer cosas de esas en la realidad, sé que sería un pecado gravísimo y mi moral me lo impediría, sin embargo entiendo que estuvo mal imaginarlas.
    Ahora he reflexionado y madurado algo y las estoy evitando y dejando. (Ya no volví a ver pornografía de ningún tipo y ya no empleo esas fantasías para masturbarme). Aún así, no tengo muy claro cual es el mejor método para vencer esos malos pensamientos. He oído que si se reprimen a veces se hacen más fuertes, y me da miedo que esto me suceda. ¿Cuál es el mejor método de evitar caer de nuevo en la tentación?
    Ciertamente me siento avergonzado, especialmente de cara a mi familia, que se decepcionaría mucho en caso de enterarse de esto. ¿Me perdonará Dios? ¿Podré vivir en paz?

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    1. yo e llorado y me arrepiento completamente de haber conocido la masturbación, ya no quiero hacerlo, quiero vivir y ser libre de esos pensamientos impuros e inmorales, daño mi salud, mis sentimientos, mi relación social y Familiar!!, aveces e pensado en la muerte como solución, se que estoy equivocado y tengo miedo de enfermarme mas mentalmente, llegar a darme por vencido, tirar la toalla, quitarme la vida....Ya no quiero vivir así, quiero que dios me ayude o me diga que hacer, quiero ser libre de estos pensamientos, quiero amar, quiero vivir!!!! me encuentro en una muy grave situación, tal ves la peor de toda mi vida, por favor NECESITO AYUDA :`(
      !!

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