Monday, March 23, 2015

Cristologia: El Milagro, Manifestación del Poder Divino de Cristo



1. Si observamos atentamente los 'milagros, prodigios y señales' con que Dios acreditó la misión de Jesucristo, según las palabras pronunciadas por el Apóstol Pedro el día de Pentecostés en Jerusalén, constatamos que Jesús, al obrar estos milagros señales, actuó en nombre propio, convencido de su poder divino, y, al mismo tiempo, de la más íntima unión con el Padre. Nos encontramos, pues, todavía y siempre, ante el misterio del 'Hijo del hombre, Hijo de Dios', cuyo Yo transciende todos los límites de la condición humana, aunque a ella pertenezca por libre elección, y todas las posibilidades humanas de realización e incluso de simple conocimiento.

2. Una ojeada a algunos acontecimientos particulares; presentados por los Evangelistas, nos permite darnos cuenta de la presencia arcana en cuyo nombre Jesucristo obra sus milagros. Helo ahí cuando, respondiendo a las súplicas de un leproso, que le dice: 'Si quieres, puedes limpiarme', El, en su humanidad, 'enternecido', pronuncia una palabra de orden que, en un caso como aquél, corresponde a Dios, no a un simple hombre: 'Quiero, sé limpio. Y al instante desapareció la lepra y quedó limpio' (Cfr. Mc 1, 40-42). Algo semejante encontramos en el caso del paralítico que fue bajado por un agujero realizado en el techo de la casa: 'Yo te digo... levántate, toma tu camilla y vete a tu casa' (Cfr. Mc 2, 11-12). Y también: en el caso de la hija de Jairo leemos que 'El (Jesús)...tomándola de la mano, le dijo: 'Talitha qumi', que quiere decir: 'Niña, a ti te lo digo, levántate'. Y al instante se levantó la niña y echó a andar' (Mc 5, 41-42). En el caso del joven muerto de Naím: 'Joven, a ti te hablo, levántate. Sentóse el muerto y comenzó a hablar' (Lc 7, 14-15). ¡En cuántos de estos episodios vemos brotar de la palabras de Jesús la expresión de una voluntad y de un poder al que El se apela interiormente y que expresa, se podría decir, con la máxima naturalidad, como si perteneciese a su condición más íntima, el poder de dar a los hombres la salud, la curación e incluso la resurrección y la vida!

3. Un atención particular merece la resurrección de Lázaro, descrita detalladamente por el cuarto Evangelista. Leemos: 'Jesús, alzando los ojos al cielo, dijo: Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que siempre me escuchas, pero por la muchedumbre que me rodea lo digo, para que crean que Tú me has enviado. Diciendo esto, gritó con fuerte voz Lázaro, sal fuera. Y salió el muerto' (Jn 11, 41-44). En la descripción cuidadosa de este episodio se pone de relieve que Jesús resucitó a su amigo Lázaro con el propio poder y en unión estrechísima con el Padre. Aquí hallan su confirmación las palabras de Jesús: 'Mi Padre sigue obrando todavía, y por eso obro yo también' (Jn 5,17), y tiene una demostración, que se puede decir preventiva, lo que Jesús dirá en el Cenáculo, durante la conversación con los Apóstoles en la última Cena, sobre sus relaciones con el Padre y, más aún, sobre su identidad sustancial con El.

4. Los Evangelios muestran con diversos milagros) señales cómo el poder divino que actúa en Jesucristo se extiende más allá del mundo humano y se manifiesta como poder de dominio también sobre las fuerzas de la naturaleza. Es significativo el caso de la tempestad calmada: 'Se levantó un fuerte vendaval'. Los Apóstoles pescadores asustados despiertan a Jesús que estaba durmiendo en la barca. El 'despertado, mandó al viento y dijo al mar: Calla, enmudece. Y se aquietó el viento y se hizo completa calma... Y sobrecogidos de gran temor, se decían unos a otros: ¿Quién será éste, que hasta el viento y el mar le obedecen?' (Cfr. Mc 4, 37-41).

En este orden de acontecimientos entran también las pescas milagrosas realizadas, por la palabra de Jesús (in verbo tuo), después de intentos precedentes malogrados (Cfr. Lc 5, 4)6; Jn 21, 3)6). Lo mismo se puede decir, por lo que respecta a la estructura del acontecimiento, del 'primer signo' realizado en Caná de Galilea, donde Jesús ordena a los criados llenar las tinajas de agua y llevar después 'el agua convertida en vino' al maestresala (Cfr. Jn 2, 7-9). Como en las pescas milagrosas, también en Caná de Galilea, actúan los hombres: los pescadores) apóstoles en un caso, los criados de las bodas en otro, pero está claro que el efecto extraordinario de a acción no proviene de ellos, sino de Aquel que les ha dado la orden de actuar y que obra con su misterioso poder divino. Esto queda confirmado por la reacción de los Apóstoles, y particularmente de Pedro, que después de la pesca milagrosa 'se postró a los pies de Jesús, diciendo: Señor, apártate de mí, que soy un pecador' (Lc 5,8). Es uno de tantos casos de emoción que toma la forma de temor reverencial o incluso miedo, ya sea en los Apóstoles, como Simón Pedro, ya sea en la gente, cuando se sienten acariciados por el ala del misterio divino

5. Un día, después de a ascensión, se sentirán invadidos por un 'temor' semejante los que vean los 'prodigios y señales' realizados 'por los Apóstoles' (Cfr. Hech 2, 43). Según el libro de los Hechos, la gente sacaba 'a las calles los enfermos, poniéndolos en lechos y camillas, para que, llegando Pedro, siquiera su sombra los cubriese' (Hech 5, 15). Sin embargo, estos 'prodigios y señales', que acompañaban los comienzos de la Iglesia apostólica, eran realizados por los Apóstoles no en nombre propio, sino en el nombre de Jesucristo, y eran, por tanto, una confirmación ulterior de su poder divino. Uno queda impresionado cuando lee la respuesta y el mandato de Pedro al tullido que le pedía una limosna junto a la puerta del templo de Jerusalén: 'No tengo oro ni plata; lo que tengo, eso te doy: en nombre de Jesucristo Nazareno, anda. Y tomándole de la diestra, le levantó, y al punto sus pies y sus talones se consolidaron' (Hech 3, 6-7). O lo que es lo mismo, Pedro dice a un paralítico de nombre Eneas: 'Jesucristo te sana; levántate y toma tu camilla. Y al punto se irguió' (Hech 9, 34).

También el otro Príncipe de los Apóstoles, Pablo, cuando recuerda en la Carta a los Romanos lo que él ha realizado 'como ministro de Cristo entre los paganos', se apresura a añadir que en aquel ministerio consiste su único mérito: 'No me atreveré a hablar de cosa que Cristo no haya obrado por mí para la obediencia (de la fe) de los gentiles, de obra o de palabra, mediante el poder de milagros y prodigios y el poder del Espíritu Santo' (15, 17-19).

6. En la Iglesia de los primeros tiempos, y especialmente esta evangelización del mundo llevada a cabo por los Apóstoles, abundaron estos 'milagros, prodigios y señales', como el mismo Jesús les había prometido (Cfr. Hech 2, 22). Pero se puede decir que éstos se han repetido siempre en la historia de la salvación, especialmente en los momentos decisivos para la realización del designio de Dios. Así fue ya en el Antiguo Testamento con relación al 'Éxodo' de Israel de la esclavitud de Egipto y a la marcha hacia la tierra prometida, bajo la guía de Moisés. Cuando, con la encarnación del Hijo de Dios, llegó la plenitud de los tiempos' (Cfr. Gal 4, 4), estas señales milagrosas del obrar divino adquieren un valor nuevo y una eficacia nueva por a autoridad divina de Cristo y por la referencia a su Nombre (y, por consiguiente, a su verdad, a su promesa, a su mandato, a su gloria) por el que los Apóstoles y tantos santos los realizan en la Iglesia. También hoy se obran milagros y en cada uno de ellos se dibuja el rostro del 'Hijo del hombre, Hijo de Dios' y se afirma en ellos un don de gracia y de salvación. 

Oración al Espíritu Santo Para Pedir Salud




¡Oh Santo y Divino Espíritu, creador y renovador de todas las cosas, Vida de mi Vida. Con María Santísima te adoro, te doy gracias y te amo!

Tú que eres dador de Vida y vivificas todo el universo, consérvame la salud; líbrame de las enfermedades que la amenazan y de todos los males que la acosan.

Con la ayuda de tu gracia, prometo usar siempre mis fuerzas para gloria de Dios y bien de mi alma y para servir a mis seres queridos.

Te pido también que ilumines con tus Dones de ciencia e inteligencia a los médicos y a todos los que se dedican al cuidado de los enfermos; que descubran las verdaderas causas de las enfermedades que amenazan la vida, y encuentren y apliquen los remedios más eficaces para defenderla y sanarla.

Oh Virgen santísima, Madre de la vida y Salud de los enfermos, a ti confío mi humilde oración. Dígnate, Madre de Dios y Madre nuestra, apoyarla con tu poderosa intercesión.

Amén.

Saturday, March 21, 2015

LIBERACIÓN DE PECADOS HABITUALES



Por el Padre James Manjackal

«¡No os engañéis! Ni Fornicadores, ni idólatras, ni adúlteros,  ni sodomitas, ni ladrones, ni avaros, ni borrachos, ni ultrajadores, ni rapaces, heredarán el Reino de Dios» (1Cor 6,9b,10). Por la repetición de un pecado, uno cae en el hábito de pecar. Cierta gente caen en pecados habituales para disimular algunas de los viejas recuedos o temores.

Si rezas honrando las llagas de Cristo y Su preciosa Sangre, serás liberado de todas tus ataduras, porque hemos sido salvados por sus heridas. 
La Sangre de Cristo, que por el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo inmaculado a Dios, limpiará nuestra conciencia de las obras muertas para dar culto al Dios vivo. (Heb 9, 14) 
  
 Debéis despojaros de vuestra vida pasada, del hombre viejo, corrompido por las concupiscencias engañosas, renovaos en vuestro Espíritu y en vuestra mente. (Ef. 4: 22)

 ¿Qué deberíamos hacer ?

- Sé consciente de tus pecados habituales. 
- Arrepiéntete de ellos y detéstalos de corazón. 
- Como eres débil y flaqueas, ve a Jesús, Él te fortalecerá en tu debilidad. 
- Si perseveras en tu vida de oración, y vida de sacramentos y haces buenas obras, estarás siempre unido a Jesús y serás incapaz de regresar a tu antigua manera de vivir. «Todo el que ha nacido de Dios no peca, porque el Espíritu de Dios mora en él y no puede pecar, porque ha nacido de Dios».  (1 Jn 3, 9) 
  
 Pactaré con ellos una alianza eterna, nunca cesaré de hacerles bien, y pondré mi temor en sus corazones, de modo que no se aparten de mi.  (Jer 32: 40)

 Recemos de esta manera:

Oh Jesús crucificado por mí en el Calvario, ten misericordia de mí. Rindo a tus pies todos mis hábitos y tinglados compulsivos (conscientemente trae cada uno de ellos que te han esclavizado   puede ser alcoholismo, fumar, masturbación, homosexualidad, cólera, egoísmo, codicia, resentimiento, etc.). Oh Divino Salvador, lava mi corazón y mi mente en tu preciosa Sangre para que sean purificados y estén limpios como la nieve. Envía tu Espíritu Santo, y la fuerza y poder que fluye de tu Sagrado Corazón, dentro de mi corazón, para que yo sea capaz de no regresar a mi antigua forma de vida. Permíteme vivir muy cerca de tu dulce Corazón para que Tú puedas estar en mí y yo pueda estar en Ti viviendo siempre una vida santa.. Alabado seas Jesús. Gracias Jesús. (Es bueno pasar más tiempo alabando a Jesús. Puedes cantar un canto de alabanza a Jesús).

Lee Mt 5, 1-48; Ef. 4, 17-32; Sal 22. 

Cuando es Semana Santa del 2015



 Los días festivos de la Semana Santa del año 2015 basándonos en el calendario litúrgico serán entre el 29 de Marzo y el 6 de Abril del 2015.

Cada año, las fechas de la Semana Santa pueden varias, ya que el comienzo de la Semana Santa coincide con un evento astronómico.

Las fechas más destacadas y festivas de la Semana Santa del año 2015 son:

29 de Marzo, Domingo de Ramos
30 de Marzo, Lunes Santo
31 de Marzo, Martes Santo
1 de Abril, Miércoles Santo
2 de Abril, Jueves Santo
3 de Abril, Viernes Santo
4 de Abril, Sábado de Gloria 
5 de Abril, Domingo de Resurrección (ó Domingo de Pascua)
6 de Abril, Lunes de Pascua, festivo en algunas comunidades

Tuesday, March 17, 2015

Consejos Saludables: El Brócoli




Las propiedades del brócoli han sido objeto de numerosos estudios científicos porque nos encontramos ante uno de los alimentos más sanos y beneficiosos para nuestro consumo.

Es un alimento con muchas propiedades entre las que está la de ser un alimento que ayuda a prevenir distintos tipos de cáncer tal como se ha comprobado al ver sus beneficios para prevenir un cáncer tan agresivo como el cáncer de pulmón.


Las propiedades anticancerígenas del brócoli


Hace no muchos años se demostró la efectividad para prevenir el cáncer causado directamente por el tabaco como el cáncer de pulmón y también en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC.

Entre las muchas y beneficiosas propiedades del brócoli se encuentra la de ser un gran antiinflamatorio a nivel pulmonar gracias a la molécula que alberga llamada sulforafano.

El brócoli tiene la propiedad de prevenir los cánceres de pulmón de tipo escamoso, que también se llama el cáncer de células pequeñas, que es un tumor que suele presentarse en personas que tienen enfermedades de pulmón previas o que fuman habitualmente.


El poder anticancerígeno de las crucíferas


Se han realizado varios estudios sobre las propiedades de los vegetales crucíferos y se ha comprobado que estos ayudan a reducir el riesgo de padecer cáncer de cualquier tipo llegándose a observar como en las personas que consumen este tipo de vegetales habitualmente tienen hasta un 64% menos de posibilidades de sufrir esta enfermedad.

Especialmente parecen ser beneficiosos para evitar los cánceres de pulmón, colon, estómago y recto y en menos medida los de ovarios, próstata y endometrio.

Entre las propiedades del brócoli por lo tanto tenemos las de:


Mejorar el metabolismo de los fármacos

Neutralizar y/o eliminar sustancias externas

Combatir la acción de los radicales libres

Equilibra el glutatión que es el antioxidante que más abunda en el cuerpo

Favorece la producción de sustancias antiinflamatorias

Refuerza las defensas del sistema inmunológico

Neutraliza el estrés oxidativo

Es un alimento altamente alcalino


El estrés oxidativo


Al estrés oxidativo se le relaciona con la aparición de distintas enfermedades entre las que está el cáncer de diversos tipos.

En este sentido, el sulforafano actúa de una manera diferente a la que lo hacen los antioxidantes clásicos, ya que neutraliza de forma directa los radicales libres. También produce un aumento de enzimas que también tienen una función de eliminación de radicales libres.


La proliferación celular


Las propiedades del brócoli se han demostrado ser también que son capaces de detener el desarrollo celular de las células tumorosas.

Se ha demostrado en muchos estudios como el sulforafano del brócoli y los isotiocianatos frenan la proliferación de las células que se producen en las fases iniciales de cáncer.

Las células tienen mecanismo en los que unos activan la reproducción de las células y otras lo detienen y el equilibrio entre estos mecanismos es el que determina la buena salud de los procesos de reproducción celular.

Estamos ante un alimento anti-cancerígeno, ya que los estudios lo que han demostrado es que los componentes del brócoli detienen la proliferación celular en tejidos precancerosos pero no en las células que están sanas.

Sin ir más lejos se ha comprobado científicamente que el sulforafano promueve la muerte celular de las células de cáncer de próstata y de colon.

Fuente: http://curacancernatural.org

Thursday, March 5, 2015

ORACIÓN POR LA SANACIÓN FÍSICA



Por el Padre James Manjackal

 Jesús cura a todos los que se acercan a Él con fe, aun hoy día. Es la fe en Él lo que cura. «Tu fe te ha curado, vete en paz» son Sus palabras. Ellas son apropiadas hasta estos días.
 
  "Le traían todos los que se sentían mal, aquejados de diversas enfermedades y sufriemientos, endemoniados, lunáticos y paralíticos y los curaba" (Mt 4:24)

 Cómo rezar por la sanación

Trae tu enfermedad al Señor que sana y ríndela con fe. Porque Jesús te ama, Él quiere curarte.Una vez que oras por una curación, debes creer en tu corazón que Él ya te ha curado, sea que tú veas la curación ahora o sea más tarde. «Y si sabemos que Él nos escucha en lo que le pedimos, sabemos que hemos obtenido lo que le hayamos pedido.» (1 Jn 5, 15). Una vez que crees que Él te ha curado, debes dar testimonio delante de los otros. Observa la mujer con problemas de sangre. Después de haber sentido el toque sanador del Señor, ella sin titubeos declaró en presencia de toda la gente por qué ella le había tocado, y cómo se había curado ella instantáneamente. (Lc. 8, 47)
 
 Pero pide con fe, sin dudar (Sant 1:6)
 
Reza así:

 Mi Señor Jesús, yo creo que me amas mucho. Te alabo y te rindo culto como mi único Salvador y Maestro. Te pido que cures mi enfermedad, dame una curación completa y hazme libre. Pon tus manos heridas sobre mi cabeza y deja que tu poder sanador se filtre a través de mi cuerpo, deja que mi órgano enfermo experimente el magnífico poder de tu toque sanador. Dame fuerza, Oh Señor, para que pueda ir por tus caminos y llevar a cabo todos mis deberes y obligaciones de acuerdo a tu Santa voluntad. Alabado seas Jesús. Gracias Jesús. Aleluya. (Repite la oración tantas veces como desees) Después de la oración de sanación, debes pasar más tiempo alabando a Jesús y si tienes el don de LENGUAS, úsalo.

 Lee Lc 6, 22-56; Heb 11, 1-40; Hch 3, 1-26; Sal 38.